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miércoles, 25 de junio de 2025

Nada, que...

Cuando no tenemos un tema de qué hablar, sacamos lo del clima. Eso pasó en la entrada anterior. No me importa el clima. 

Conozco a personas que nunca pasan a otros temas. Todo va por encima, porque en todo somos lo contrario, postura opuesta. 

Cuando no se puede hablar de religión, ni futbol, ni política, así se pone la cosa. Por eso yo prefiero juntarme con personas afines en esos temas, con quienes nos podemos expresar lo que pensamos libremente, sin temor a desavenencia. 

Así me sucedió con mi hermana mayor, pasamos toda la vida hablando de "nada" y "estando muy bien"...

Y cuando quise que habláramos de otras cosas, de realidades, de nuestra vida, de nuestros buenos y malos momentos, qué creen, me dejó de hablar para siempre. Hace poco... Hasta me enfermó nuestra separación de por vida, que ya será poca. 

Hay quienes no soportan que uno ose traspasar sus fronteras. Y yo que es lo que más hago. 

Se crean personajes en los que viven y cuando hay quienes no les creen su personaje... ¡Bronca!

Conocí a un chico, hace 3 años, de la edad de mi hija en un viaje, en dos horas nos contamos más de nuestra vida que mi hermana y yo. Y somos los grandes amigos por siempre, nos comunicamos casi a diario. más que si fuéramos de la misma familia. Y, nunca se nos terminan los temas. Bendito viaje que hubiera sido muy aburrido si nos nos hubiéramos conocido. 

En fin... Es química, es... no sé qué, lo que provoca que hay quienes somos muy compatibles a la primera. Y otros que en toda la vida nos repelemos aunque seamos de la misma familia. 

domingo, 22 de junio de 2025

Pronóstico del tiempo

En los sitios virtuales no tienen ni mínima idea cómo es que estará hoy y en los próximos días. Porque lo mismo puede llover, que granizar, nevar o nada de eso. 

Entonces no hay más opción que salir, ver con cierto detenimiento y sentido común, que ha llovido ayer en la noche, que puede que llueva hoy en la tarde noche también y que se incrementarán las poblaciones de mosquitos. 

Que aunque sea domingo, hay que lavar ropa muy temprano para que alcance a secarse, antes de la posible tormenta de más tarde y antes de que salga el incinerante sol. 

Que desde aquí les mando un afectuoso abrazo a los madrugadores o que tengan otro horario.

Que quien lo apetezca es bienvenido a desayunar aquí, que tendré barbacoa o menudo, a ver qué cosa está más apetecible en la fonda del chico de a la vuelta. Café por supuesto y pan salado y dulce. 

Que Dios nos agarre confesados, en el día final, que no se sabe si será en mil años o mañana, según dispongan los irresponsables que mandan, puesto que el mundo lo conservan en llamas. 

Pero también algunos corazones nos conservamos con la luz encendida de la esperanza de que los buenos somos más y que el amor siempre será más que toda locura mercantilista. 

¡Cuídense! 

*Sí sé que abusé de "que". Pero... ¿Y qué? Todo se vale desde la orilla del acantilado.