Recuerdo que un jefe me dijo, cuando le reclamé sobre ciertas condiciones de trabajo: "Aquí no se puede decir lo que se piensa, Sarita. Si viera la cantidad de gente que hemos tenido que despedir por ese simple detalle."
¿Qué piensan quienes me conocen que hice?
Claro, no acaté y tuve mi rescisión muy pronto. (Pero no acepté injusticias). Lo peor del caso es que ni siquiera estaba abogando por mí, sino por unos compañeros.
Bueno, pues ahora resulta que amaneció mi blog sin desplegar la lista de blogs que sigo. Así que les pido comprensión y paciencia. A ver si se resuelve. Seguramente estarán reprogramando esa sección por parte de la plataforma de blogger.
¿A qué viene un tema con otro?
Solo a que no me hayan aplicado lo que en aquel trabajo, por andar tundiendo a las redes sociales.
Qué dijeron. Ya que no te gustan las redes, te eliminamos tu lista de publicaciones de tus amigos, para que no te mortifiques y mantengas tu aislamiento social.
Nooo, por favor... No me hagan eso. Que con ellos si quiero comunicarme.
Quién te entiende mujer!
Ojalá que se restablezca pronto.
Adiosito compitas. O sea ai los vidrios. O ai nos vicenteamos soon.
:)