Mi blog parece una estación de tren. Siempre hay alguien que se va. Lo triste es cuando no me lo dicen y no me dan la oportunidad de sacar mi pañuelo blanco para despedirlos.
Me gustaría poder decirles cuando eso sucede: fue tan hermoso conocerte, tratarte y te deseo un maravilloso camino y un feliz arribo a donde vayas. Regresa si un día te nace hacerlo, que estaré de nuevo para ti.
Me quedo de todas formas en el andén, viendo como parte ese tren y despidiendo a quien se haya ido de mi lado y deseándole que llegue sano y salvo a su destino.
En los blogs, pasa lo mismo que en la vida diaria, nunca falta quien nos sorprenda, para bien y para mal, simple y sencillamente porque somos los mismos.
En la vida todo fluctúa.
ResponderBorrarAbrazos.
Constantemente.
BorrarBesos, Alfred.
Los blogs tienden irremisiblemente hacia el pasado.
ResponderBorrarOtras redes sociales los han sustituido.
Es así. Aunque algunos aferrados como yo no queramos aceptarlo.
BorrarBesos.
En las estaciones de tren, unos se van, pero suelen venir otros.
ResponderBorrarLos blogs van de capa caída, las personas prefieren apuntarse a las redes sociales, que son más inmediatas y normalmente con poco contenido.
Atrás quedaron los días en que los comentarios, al menos en mi blog, llegaban y en ocasiones superaban los 100 que me tenía que poner las pilas para contestarlos a todos.
Incluso en alguna ocasión las visitas superaron en un solo día las 30.000 (si treinta mil), aunque en este caso hubo pocos comentarios.
Te dejo el enlace en el que en un día recibí 32.384, hubo otro día más.
Un abrazo.
Ya lo creo que tenías que ponerte las pilas muy en serio para contestar tal cantidad de comentarios. He ido a tu entrada referida, con esa gran cantidad de visitas en un día. Tu has sido un campeón. Es un mundo esa cantidad!!!
BorrarLas cosas han cambiado radicalmente. . Quedaremos en el recuerdo de una época.
Un fuerte abrazo.
Te comprendo pero sin duda volverán si es que no traspasaron la otra orilla.
ResponderBorrarTambién como en las estaciones de tren, hay gente que llega llena de ilusiones.
Unos y otros llevan algo nuestro, igual que a nosotros nos queda algo de ellos.
Un beso,preciosa.
De cada persona aprendemos algo. Pienso que cada vez serán menos las nuevas personas que inicien está actividad, como ya han dicho, las redes los han absorbido.
BorrarUn gran abrazo.
Es así Sara, y nos sorprende mucho más si la persona que se va era muy cercana en los comentarios y de un día para otro vemos que la encontramos en otros lugares pero no en el nuestro. Pero la vida es así, tenemos que aceptar que no siempre coincidimos en los sentimientos, un abrazote Sara!
ResponderBorrar"No siempre coincidimos en los sentimientos", está frase encierra una gran verdad. Yo he creído que entre los que estamos asiduamente frecuentândonos nos apreciamos y resulta que no siempre es así. Además "el descarte" es algo que se está haciendo una costumbre, ya pocos ponemos en la balanza pros y contras... a la primera inconsistencia o diferencia de opinión, zaz, 'hasta nunca más te vuelvo a ver" aunque hayamos tenido años de coincidencias.
BorrarUn abrazo muy grande!!!
Debo ser de las pocas personas que no tengo Facebook, ni Instagram, ni Twitter... me gusta lo justo el cotilleo y prefiero bucear por sentimientos y sensaciones que nos ofrecen los blogs.
ResponderBorrarLos parones pueden suceder por muchas causas, unas veces puedes despedirte, otras imposible... lo digo por experiencia propia. Sea como sea, siempre hay que desear un buen viaje y agradecer el tiempo compartido.
Besos, Sara.
Yo tampoco he estado en esas redes, ni creo llegar a estar en un futuro, tengo muy claro que no me gustan. Y cuando alguien que uno ha frecuentado durante años en muy buena comunicación decide irse, merece una despedida afectuosa y nuestros mejores deseos para su camino, por eso nunca he comprendido cuando se van de manera furtiva, quienes uno aprecia y hemos creído que nos aprecian, independientemente de si escribimos bien o no o de diferencias de opinión sobre diversos tópicos.
BorrarUn gran abrazo.
Acá están los que piensan
ResponderBorrarEn otras redes solo taraditos que siguen a la masa, o que ya le tienen todo estructurado, escribí acá, pone tu foto acá, o lo limitan con palabritas y #hagtahs o como se escriba
Que no se muera nunca el blogs, donde existe real libertad de expresión, libre albedrio...
Y que se va, se lo comio la masa...
Abrazos dominical!!!
Has dicho muchas verdades, Carlos. Ojalá que sigamos firmes en lo de bloguear.
BorrarBesos dominicales.
En los blogs quedamos algunos románticos que luchamos por subsistir.
ResponderBorrarYo, utilizo las redes sociales con bastante asiduidad, pero tampoco me lo tomo a la tremenda.
En el blog, procuro ser fiel a mis viejos amigos blogueros.
Se crea una corriente de complicidad muy bonita.
Besos, querida Sara.
Es un ambiente muy agradable, en el que podemos crear muy importantes vínculos.
BorrarFuerte abrazo.
Bueno... Hay billete de ida y vuelta. Yo cogí el tren en 2007 y aquí sigo, no me he bajado nada más que en la estación de la salud, cuando me ha faltado. Ahora llevo un tiempo luchando y la depresión me puede a veces, pero vuelvo al vagón de la felicidad donde tengo amigos que merecen la pena. No me gustan las redes sociales.
ResponderBorrarUn abrazo Sara. Coloca en mi asiento el cartel de reservado.
Tú tienes tu siento siempre disponible y el mío al lado, para donde quieras ir, yo te sigo y encantada de acompañarte.
BorrarUn gran abrazo.
Pues dejemos marchar a quien quiera irse dejándole la puerta abierta por si quiere regresar.Besicos
ResponderBorrarSiempre serán bienvenidos, que en nuestras casas son bien admitidos.
BorrarUn abrazo.
Las redes sociales van cambiando todo.
ResponderBorrarUna pena.
Creo que la fidelidad es bonita.
Un fuerte abrazo.
fieles nosotras por tantos años! Un placer contar contigo, Amalia.
BorrarUn abrazo fuerte.
Paul no soltaba su mano y ella se quería marchar... El tren lanzaba vapores mezclados con humo. Aquello era un ir y venir de gente en plena estación de Córdoba... Teresa soltó una lágrima y le dijo que no se llamaba Mary. Paul le dijo: yo me llamo Domingo.
ResponderBorrar- Aún así, Paul, no trates de entenderme, soy demasiado complicada y poco o nada previsible. Los silogismos conmigo se convierten en sofismas… Y sobre todo y ante todo quiero y debo ser leve.
Mary soltó su mano y Paul cerró el puño para retener aquella calidez; como si algo fuera suyo ahora; como si el corazón de aquella mujer se hubiera quedado impregnado en la palma de su mano y viviera en ella durante unos segundos. Aquellos labios, fresas en una película en blanco y negro, le decían el adiós más definitivo. Un final esperado
porque Paul, hombre cabal, sabía de las fronteras de la amistad.
El silencio empañó la estación. Mary dejó el pañuelo en el suelo para que el viento se hiciera cargo de toda la soledad y subió al tren. Pero la despedida no podía ser definitiva, porque lo que dejaba a medias jamás cesaría de rondar en su cabeza. Las ruedas de la vida se movían con el tren, y con ellas el corazón de quien lo deja todo en Córdoba.
Lejos, en la distancia, un niño corría detrás de un pañuelo
Es una historia muy conmovedora, como solo con tu sensibilidad se puede lograr.
ResponderBorrarFuerte abrazo, Domingo amigo.
Aunque cueste llegar a veces a los blogs, los prefiero de todas maneras , igual no puedo cumplir con todos , ya que escribo en 2 más, pero si es posible seguir compartiendo y en verdad si alguien tiene de pronto una comunicación muy desigual o que se aleja demasiado a mi forma de ver la vida , yo lo abandonaré, no me queda genio para estar alegando cosas que no me llegan o más bien, que no me dejan un sentir compartido, y en ello creo ya he despedido a varios en la estación...
ResponderBorrarAbrazos.
Espero que de mí no te despidas, te aprecio y me ha gustado mucho estar cerca de ti todo este tiempo.
BorrarFuerte abrazo.
Hola Sara, no hay lugar a dudas que el paso del tren es vinculante y si estas al punto, tomaras la marcha hacia el destino, pero sin no lo estas, no podrás seguir su estela ni contemplar desde su recorrido lo que se ofrece en el panorama de la vida…gracias por estar.
ResponderBorrarUn abrazo
Bellas tus palabras, gracias a ti por haber llegado a mi vida.
BorrarAbrazos.
En la resistencia nos quedamos
ResponderBorrarUn abrazo
Hasta donde nos alcancen las fuerzas compañero.
BorrarUn abrazo.
Cerremos a la vez. Todos
ResponderBorrarUn suicidio de blogs en masa.
BorrarBesitos.
Yo fluctúo entre los blogs y otras redes pero los amigos que hecho en el blog han sido muchos y duraderos. Un abrazo
ResponderBorrarEres una bloguera muy querida y admirada. Agradezco el haberte conocido.
BorrarBesitos de anís.
13 años llevo con "Tomara que tuviera..." Hace unos años la blogosfera era un hervidero, me llevaba todo el día visitando blogs, pero eso ya pasó a la historia, las nuevas red sociales son mucho más rápidas y efímeras en tiempo, los blog son lentos pero permanentes, puede utilizar el facebook para compartir los post como yo hago, que es para lo único que lo utilizo, y la verdad es que me va muy bien, pero está claro que mis texto ahí son efímeros pero por un momento son muy leído, de todas forma no publico nada en el si antes no le he escrito en mi blog, un saludo a por otros 13 años y vosotros lo leáis... un saludo a todos los blogueros.
BorrarCuando te conocí, recuerdo que me impresionaba la cantidad de comentarios que te hacían.
BorrarSigamos de blogueros pase lo que pase.
Un abrazo.
Por desgracia las redes sociales van absorviendo a la gente,abrazos amiga.
ResponderBorrarLos absorben con todo y zapatos, a algunos ya no hay ni cómo rescatarlos, jajaja.
BorrarUn abrazo.
Cierto es que en los blogs hay quienes son "visitantes golondrinas", pero también los y las hay que no dejan pasar ni una sola entrada sin su presencia.
ResponderBorrarLuego, están los que pasan a comentar en ocasión de publicar ellos, de lo contrario nunca llegan.
No me inquieta, ya te lo he dicho, la cantidad de comentarios, si la calidad de los mismos. También he visto quienes comentan al pasar sin estar realmente consustanciados con el tema en cuestión y están los que leen hasta cada uno de los comentarios vertidos.
En fin "Hay de todo en la viña bloguera" como no podría ser de otra manera pues la diversidad es amplia.
Abrazo va y ¡buena semana Sara!
Buena semana, querida Lu.
ResponderBorrarUn abrazo muy grande.
Sí, amiga, de vez en cuando sucede.
ResponderBorrarBesos ❤️
Fuerte abrazo, amiga.
BorrarEstoy en total acuerdo Sara, pasa con mas frecuencia de la deseable.
ResponderBorrarAbrazos y feliz fin de semana.
Gracias, Conchi. Feliz semana.
BorrarUn gran abrazo.
Hola de nuevo amiga , no estés triste por la persona que se marcho sin decirte adiós esto del blog , es como la vida misma.
ResponderBorrarTe pondré un ejemplo , yo tengo una vecina en la casa nueva en la que me mude hace casi 7 meses , que cuando llegue fue una grata bienvenida , pues bien como digo han pasado casi los 7 meses , y solo nos hemos cruzado 3 palabras , hola y adiós....Y buenas tardes , pues aquí pasa lo mismo.
Así que no te apenes , ya volverá si quiere , besos de tú flor consentida.
Gracias, muy Flor. Siempre tan linda y afectuosa.
BorrarUn fuerte abrazo hasta donde estés, con todo cariño.
Un lugar de encuentro... Unos van, otros vienen. Como en la vida...
ResponderBorrarBesicos.
Es una lata que se nos están perdiendo los comentarios, acabo de rescatar este tuyo en spam.
BorrarBesos.