¿Cuánto pesa el miedo?
¿Cuánto pesa la pena?
¿Cuánto pesa la decepción?
Lo suficiente como para robar todo el espacio donde van al amor y la alegría.
Nunca, nunca hay que permitirlo, porque pueden pesar tanto, que no dejen ni andar, ni volar.
Hay que sacudir las alas, cada vez que aparezcan nubes negras sobre nosotros y surcar todos los cielos, con la ligereza que da la confianza en que podemos hacerlo.
Fui en busca de serenidad, para volver a ser como me gusta ser.
Hace mucho bien, tomarnos un tiempo para estar a solas y pescar nuevos sueños. Lo logré y aquí estoy de vuelta.
Te ha sentado muy bien porque vuelves pletórica y llena de ideas con hermosas reflexiones. Un abrazo un abrazo enorme
ResponderBorrarGracias por tu preciosa bienvenida, Ester. No sé si con muchas ideas, pero sí con serenidad.
BorrarGran abrazo.
Eres una super Woman, tenemos que tomar ejemplo de ti.
ResponderBorrarUn abrazo.
Cuán generosas son tus palabras, Tracy.. pero soy insignificante.
BorrarUn gran abrazo.
Me alegra mucho eso, no sabes cuanto...
ResponderBorrarBesos 🌺
Gracias, Vero. Sé que es sincera tu alegría por mí.
BorrarFuerte abrazo.
Me alegra mucho que lo hayas logrado.
ResponderBorrarAdelante!!!
Besos.
Estimada Sara, bienvenida a este rincón donde se criba ese maléfico intuir que a veces tanto pesa y tanto nos impide ser ese nosotros mismos, ante este cosmos sumido en tanto y tantos desequilibrios, pero que hemos de sortear y por un momento o un instante poder volar. Gracias por ese positivo afán.
ResponderBorrarUn abrazo
Nos favorece mucho darnos la oportunidad de poner atención a lo que sentimos y resolverlo.
BorrarUn fuerte abrazo.
Um texto perfeito Sara... e tão verdade!
ResponderBorrarSim! Precisamos de momentos só nossos,
para ir em busca dos nossos sonhos, e encontrar
a serenidade que precisamos para viver!...
Te dejo mi abrazo!
Muchas gracias, Albino. Me hacen mucho bien tus palabras y tú abrazo.
BorrarTe abrazo también.
Pesa, incluso para no dejarte respirar.
ResponderBorrarMe parece estupendo tomarse el tiempo necesario para volar y soñar. Vuelves renovada, que es lo que más importa.
Besos, Sara.
Así es, ya traía demasiado peso encima. Era necesario poner toda mi atención en disolverlo, para no asfixiarme.
BorrarGracias!!! Un abrazo.
Y acá te tenemos de vuelta Sara! Con todas las pilas para seguir adelante!!! Una gran alegría! Un abrazo fuerte!
ResponderBorrarEspero que estés recarga de pilas, me aguante lo suficiente. Ya andaba apenas y a penas.
BorrarGracias por alegrarte.
Un fuerte abrazo, Cristina.
Me alegra que lo hayas logrado y que ahora puedas trasmitir serenidad a los que te rodean y a través de tu escrito a tus seguidores.Besicos
ResponderBorrarMuchas gracias, Charo. Cada día que volvemos a tener, es una gran oportunidad de darnos a los demás.
BorrarBesos de anís.
Pues enhorabuena por todo ese afán optimista. Besos
ResponderBorrarMuchas gracias, Inma. Espero lograr mantenerme en esa vía de aprovechar cada momento.
BorrarUn abrazo.
Eso me hace falta a mi, amiga, serenidad ante tantas vicisitudes del cuerpo y del alma. Tú has tenido el valor de lograrlo, yo necesito un empujón fuerte antes de que la depresión se apodere de mi.
ResponderBorrarRamitos de estrellas azules.
No necesitarás de fuerte empujón. Podrás lograrlo con suavidad y ternura, conforme respiras. Date permiso de cubrirte con el inmenso amor que generas, pensando está vez en ti, antes que en los demás. No será egoísmo, sino prioridad. Lo vas a lograr. Si yo pude, tu podrás de sobra. Tienes gran capacidad emocional.
BorrarGran abrazo.
... Bienvenida
ResponderBorrarUn abrazo
Gracias, Ángel.
BorrarUn fuerte abrazo.
Me alegra amiga,abrazotes.
ResponderBorrarTodo esta ahí para lograr ese equilibrio y si a solas es mejor sin dudas...se logra la apertura a lo que realmente es relevante en la vida y la nuestra preferentemente.
ResponderBorrarTe dejo un abrazo.
Gracias, Magdalena, es muy necesario buscar un lugarcito donde reflexionar y ponernos en calma.
BorrarUn abrazo.
Como dice el refrán, en ocasiones "Más vale estar solo que mal acompañado", ello hace que se pueda recapacitar, pensar y ordenar los pensamientos buscando la tranquilidad que toda persona de bien trata de encontrar.
ResponderBorrarUn abrazo.
Eso mismo quería hacer en un espacio personal, sin tener que acordar y cumplir con nadie.
BorrarUn abrazo.
Buenísimo, felicidades.
ResponderBorrarAbrazo
Gracias, Rosario!
BorrarBesos.
Hola Sara , muy buena reflexión .... Si quieres un buen consejo de una amiga que te quiere y no te olvida , aun que no venga a verte en algunos días (que es muy raro) te puedo decir , que yo al menos soy un ave fénix , que en mis 46 años de edad , he tenido momentos buenos y malos en mi vida , y cuando he tocado fondo que pensaba , que ya no iba a salir a flote , siempre encontré una tabla de salvación , o bien pidiéndole a dios , y mayormente la gran ayuda de mi familia , que somo como una piña , y después de una semana , renazco de mis propias cenizas como el ave fénix , y vuelvo a remontar el vuelo.
ResponderBorrarAsí que si tienes , que hacer una parada , y tomarte tú tiempo hazlo , que aquí estaremos a la vuelta de tu regreso , como también te digo que si pides ayuda y tienes fe , todo se arreglara , te deseo una feliz tarde , besos de tú flor consentida.
Sin duda!!! Sin fe no podría vivir. Siempre Dios abre las puertas a nuevas y mejores circunstancias. A mí me gusta retirarme de vez en cuando y encuentro en el silencio ya los soledad la forma de resolver mis conflictos internos.
BorrarBesos, mi preciosa!!!
Me encanta saber que encontraste esa serenidad que necesitabas. Tu escrito es alentador y aleccionador. Bravo👏🏼👏🏼👏🏼👏🏼👏🏼👏🏼
ResponderBorrarCon tantas maldad noticias, con tanta crisis y caos, era urgente alejarme por unos días y me fue muy bien, favorablemente.
BorrarBesos.
Me alegra mucho hayas alcanzado tu objetivo.
ResponderBorrarYa me gustaría...
Un fuerte abrazo.
Es tan necesario darnos esas oportunidades, que debemos buscarlas y aprovecharlas.
BorrarMe fue muy bien, querida Amalia, luce deshacerme de varios pesos que cargaba.
Un abrazo.