Noche de estrellas

Aprovecho este cielo maravilloso para invitarte a reflexionar acerca del odio. 

Esto por los recientes acontecimientos que tal vez pueden ser los últimos... Si se diera la tercera Guerra Mundial, acabaría con la vida en definitiva. 

Yo no puedo odiar a Putin, primero porque no lo conozco en persona, segundo porque mantiene un régimen político, afin a mi ideología. 

En cambio, siempre he sido adversaria del imperialismo, porque estando de este lado del mundo, tan cerca de "USA te usa", sé perfectamente como son sus manejos, puesto que los he vivido de cerca. 

No hay guerra que ellos no provoquen, o en los que no estén detrás, porque con su incapacidad para ser productivos, la única forma en que siguen dominando es a través de la violencia y el despojo. Pero ya están en decadencia y no quieren reconocer que hay otras dos potencias: China y Rusia. 

Es verdad, algunos líderes como Mao, Putin, Fidel Castro, Chávez y ahora Maduro, se logran perpetuar en el gobierno. Porque es la misma población, quien, ya teniéndolos allí, no desean que dejen de gobernar, porque conocen el otro régimen, el capitalismo rapaz, el neoliberalismo que ha devastado a las sociedades y nadie quiere regresar a esa barbarie de desigualdad e injusticia. 

En todos los medios occidentales, no dejan de difundir que Putin es un demente, asesino y tienen al líder de Ucrania como un noble ser, cuando no ha sido más que un incapaz monigote impuesto por USA. 

Que al igual como en todos los países que han sido sometidos, mediante invasiones y arbitrariedades de USA. Así como impusieron sistemáticamente a  la mayoría de los presidentes que habíamos tenido en México, en contra de la voluntad del pueblo. 

Hoy con AMLO, teme USA que se propague el socialismo por Latinoamérica y ¿sabes?, aunque nosotros no tenemos un régimen socialista, sería lo mejor para nosotros.

 Defender como él lo está haciendo, nuestra soberanía y mantener la autosuficiencia que tenemos. Pues Latinoamérica es rica en todos los recursos naturales y unidos, para nada se necesitaría comerciar con USA. 

Después hablamos de la Otan otra lacra y del constante hostigamiento en que han tenido a Rusia durante décadas, por lo que hoy tomaron la decisión de ponerles un alto. 

Sin embargo, el hostigamiento y estrangulamiento económico que el imperialismo sostiene sobre los países que tienen otro régimen, no justifica la invasión de Ucrania por Rusia. 

He leído con mucha pena a amigos blogueros que yo he creído que tienen una sólida escala de valores, que son personas amorosas y coherentes, pedir, exigir, maldecir y desear, la muerte de Putin. Tal vez convendría que reflexionarán y que se informen más.  Porque quien es amoroso, no debe permitirse odiar. Al primero que uno debe bendecir es al enemigo, para que la luz no les permita hacer daño. 

No odien, amigos, el odio personal flota y da más fuerza al odio que hay entre los gobiernos de las dos naciones implicadas en este conflicto, que deben resolver entre ellos y no intervenir otros países, porque entonces si será grande el perjuicio al mundo. 

Dios bendiga a los rusos y a los ucranianos, así como a todos los pueblos del mundo. Con quienes podemos tener diferencias, pero que esas diferencias no deben de impedirnos amar. No hay que permitir que nos obnubilen y nos manipulen con tanta información falsa. Es por eso que me había mantenido callada, tratando de entender el proceder de la gente, de mis amigos, incluso de algunos de mi familia, antes de emitir mi opinión, desde mi experiencia y una vez hecha la limpieza de mi corazón de sentimientos destructores. 

Amor y paz, hasta la victoria, ¡siempre!