A veces pienso en que me gustaría ser tortuga, para tener una gran coraza y que todo se me resbalara.
O una yegua, para cruzar los campos, a todísima velocidad y desbocarme de vez en cuando.
Una abeja, obvio reina, para beber las mejores mieles.
Tal vez perra, pero como Cuca, para tener "amos" a mi servicio, que me mimen todo.
O tal vez un animal de garras y dientes, muy, muy salvaje. Las aves, y así... Una lista enorme de animales, según les encuentro admirables ventajas en su modo de vida.
Pero llegas tú y desaparece la fauna. Me rehumanizo en un instante.
El texto, original... (Siempre es bueno "navegar" hacia los mundos de nunca jamás!)
ResponderBorrarSobre el final... ¿Ese tú es tu yo real? :)))))
Abrazos Sara..
Ah, mira... Muy interesante tu apreciación, Ernesto. Podría también ser el yo real.
BorrarAbrazos.
Siempre acabamos claudicando de los sueños.
ResponderBorrarBesos.
:))) Siempre.
BorrarBesos.
Hermosa confesión a ese "tú" que te rehumaniza con su presencia. Me alegro de saber a la protagonista de tu poema en prosa bien acompañada. Un abrazo
ResponderBorrarGracias, Joaquín.
BorrarUn fuerte abrazo.
Que siempre haya alguien que te devuelva a nuestro lado, Sara! Un abrazote!
ResponderBorrarGracias por tu buen deseo.
BorrarUn gran abrazo!!!
Es una gran suerte tener a alguien que te vuelva a la realidad .Besicos
ResponderBorrarNo hay en el mundo maravilla más grande que ser humano.
BorrarUn gran abrazo!
Me encantó. Un texto diferente. Te felicito!!
ResponderBorrarAbrazo hasta allá.
Gracias, Carlos. Eres muy amable y estimulante.
BorrarUn abrazo.
Una interesante metamorfosis , nada dura eternamente...Abrazo
ResponderBorrarSiempre estamos cambiando. Los animales son muy inspiradores.
BorrarUn abrazo.
Al no tener ese "tú", me quedaré un rato más en ese mundo (quizás menos salvaje que el nuestro), hasta que a mi tú (es decir, yo misma), no le quede otra que regresar. ;-)
ResponderBorrarBesos, Sara.
Siempre hay un "tú" que nos regresa a nuestra humanidad. Así sea el mismo yo, quien ejecute la función del "tú".
BorrarEso es lo que pretendo decir, que el ser humano es más, que el animal que más admiremos.
Un gran abrazo, Paula!
Ese "Tú" es el maravilloso hechizo de la vida de los humanos.
ResponderBorrarEse truco inesperado que acaricia para siempre el corazón.
Disfrútalo.
Besos.
Ese tú siempre ha sido mi hija. Es quien más tiene la llave de todas mis sensibilidades positivas.
BorrarUn abrazo.
Seamos fauna salvaje... en cuanto hay domesticación hay dominación y subordinación
ResponderBorrarAbrazo
Eso sí. Perdemos nuestra libertad. Salvajes entonces!!!
BorrarAbrazos.
¡Que bello texto Sara! ¡me encantó ese giro que le das al final.
ResponderBorrarMe gustaría ser gata...por la independencia, porque los amo, porque saben cómo "domesticar humanos"...porque sí.
Y si llega "ese tú" ...¡pues jugaríamos a ser felinos por un buen rato!
Hasta que nos "rehumanicemos" ambos
beso ¡buen finde que viene llegando!
Este año los fines de semana están a la vuelta de inmediato. No sé por qué no me rinden las semanas.
BorrarGran abrazo, amiga!!!
Hermoso texto amiga,abrazote.
ResponderBorrarSomos más que el mundo animal, falta que lo demostremos. Ojalá.
BorrarFuerte abrazo
Me encantó tu texto, Sara. Todos tenemos nuestro lado salvaje que muchas veces se manifiesta. Pero cuando llega ese “Tú” que nos humaniza, todo se transforma y nuestro lado humano se entrega a su verdadera condición.
ResponderBorrarEspero que tengas un buen fin de semana.
Un gran abrazo.
Muchas gracias, Albino. Tu amabilidad y generosidad me hace sentir muy bien.
BorrarUn fuerte abrazo.
A veces se dispone uno a buscar una salida, pero llega el amor y lo cambia todo anulando la voluntad. Me ha encantado, Sara.
ResponderBorrarMuchas gracias, Paco, por tu precioso comentario. Lo guardo en el corazón.
BorrarUn abrazo.
Lindo tener a alguein que sea un eje, que te ubique.
ResponderBorrarYo elegiría para animal mi signo zodiacal, el gallo. Me cae simpático, saludos.
Ah, qué bien. El gallo es muy lindo animal, me gusta mucho.
BorrarLos amores, los cariños, los afectos, tienen esa cualidad, entre muchas otras.
Saludos.
Muy original y bonito, Sara, no estaría nada mal :)
ResponderBorrarMe alegra saberte acompañada y feliz.
Besos, buen fin de semana 🌹🐾
Muchas gracias, Vero. Y... ni más, ni menos. No hay novedades. :)
BorrarBesos, flores y huellitas.
Hola Sara, bonita entrada. Creo que yo elegiría ser un ave, para poder volar libre y ligera como el viento. Que siempre tengamos un tú que nos rehumanice .
ResponderBorrarAbrazotes y lindo fin de semana!
Gracias, Cecy. Pensamos en volar como las aves y nos sentimos libres, pero ellas siempre están expuestas al peligro de ser alcanzadas por los depredadores, y estar alerta siempre, ya no resulta tan lindo como parece.
BorrarTener a un "tú" humano, es magnífico, pero puede fallarnos o llegar a faltar por muchos razones, tú lo sabes, entonces, sufrimos mucho durante el proceso de asimilación y aceptación. Tener a Dios, eso es infalible. Y no voy por tratar de convencer a nadie.
Muchos besitos de anís.
Detenerse en la naturaleza y reflexionar nos ayuda a tener una visión más amplia de la vida, Sara...En la naturaleza hay mucho amor de su Creador, ahí estamos nosotros, formando parte de esa naturaleza y llevando características de los animales...De pronto el amor nos hace sentir humanos y divinos y nos eleva, pero seguimos siendo tierra limitada, amiga.
ResponderBorrarMi abrazo entrañable y felices días de agosto.
Muchas gracias, María Jesús. Y si es amor a Dios, todavía es más maravilloso.
BorrarUn fuerte abrazo.
Que suerte encontrarte con alguien que te REHUMANIZE!!! porque estamos rodeados de DESHUMANIZACIÓN; así que disfrútalo!!!
ResponderBorrarConxita ^:^
Mi querida Conxita, hay personas que tienen el don de inspirarnos mucho a sentirnos bien. Me pasa con mi hija.
BorrarUn abrazo grande.
Que bueno tener a alguien que te lleve a la realidad... lindo texto, Un beso
ResponderBorrarMuchas gracias, Hanna. Eres muy amable.
BorrarUn fuerte abrazo.