Inmensa negrura alrededor,
la luz no puede ver la luz
está disuelta en ella,
es parte de ella.
Por eso, la luz solo ve negrura.
Negrura, gracias a la cual
se nota su brillantez
desde cualquier perspectiva.
Sin embargo,
la negrura
ataca
lacera
hiere
hace mucho daño
y duele
y minimiza
y mutila
y mata.
Es mejor estar lo más distante
de la oscuridad,
de esa noche de muerte
que ahorca,
que asfixia a la luz
hasta apagarla
con cualquier viento tenebroso.
Protéjase la luz
entre la luz,
siendo una simple partícula más,
una insignificancia
y elevarse en el conjunto,
en el mar de luz
para irradiar,
para continuar su propósito,
sin ser alcanzada
por la oscuridad
nunca más.
Nunca más.
Siempre luz, Sara, en todo...
ResponderBorrarBesos, buen fin de semana 🫂
Siempre, Vero. No dejar que se extinga.
BorrarBesos y mis mejores deseos también.
Entiendo que el texto, certero en su expresión, tiene qué ver con Sara O... :))))))
ResponderBorrar¿Pero con cuál Sara? ¿Con la joven de la fotografía del final de la página, o con la sentada en la "piedra filosofal" que, se le supone, ha dejado huella en ella?
Abrazos Sara.
Tiene que ver con la luz y la oscuridad, no conmigo por edades.
BorrarLa piedra filosofal... Allá en la época de los alquimistas. ¿Quién se hubiera podido recargar en ella? No creo que alguien pudiera. Me has hecho reír. Gracias. :)))
Un abrazo.
Por ahí iva la cosa, amiga! :))))
BorrarGracias!!!
Borrar:))) Hace mucha falta el buen humor, que tanto nos alivia de tanta cosa fea que está pasando.
Quien ha sido alcanzado por esa oscuridad, bien sabe de sus alertas y de sus efectos... seguramente nunca volverá a pasar, porque ya la ha conocido...
ResponderBorrarBesitos, dulce Sara.
Volverá a pasar cada vez que sea necesario, puesto que abunda la oscuridad, pero será con mayor fortaleza y determinación.
BorrarFuerte abrazo.
Salir de la zona oscura no es fácil pero por algún lado siempre entra una mínima lucecita a la que hay que aferrarse, y seguirla hasta llegar a la luz, a la claridad que ilumina los días y la vida.
ResponderBorrarBeso, Que tu domingo sea muy luminoso Sara
Yo también te deseo un domingo lleno de luz.
BorrarTenemos suficiente luz en el interior. Hay que tener esa confianza y no buscarla donde no está.
Un gran abrazo.
Poder vislumbrar la luz en medio de la oscuridad ya es un milagro, Sara, un abrazote,!
ResponderBorrarEl milagro es que siempre existe esa luz, por más que la oscuridad se expanda.
BorrarUn gran abrazo, Cristina..
Me gusta el poema.
ResponderBorrarMe gusta ese afán de luz...
Yo también lo tuve... eran otros tiempos... sin embargo poco a poco todo fue oscureciendo... no fui yo, lo juro, fue la vida... año tras año la luz retrocedía y la oscuridad avanzaba... desaparecía gente querida y crecían los desengaños... y tuve que adaptarme.
Me refugié en la poesía, por cierto qué buen poema este que nos regalas, y ahí sigo viendo como el mundo oscurece sin remedio.
Sigo buscando luz pero no encuentro... sí que encuentro espejismos... muchísimos pero luz auténtica no.
Besos.
Entristecen mucho las pérdidas y esos adioses para siempre de la gente amada. Nos quedamos solos. También la situación en que está el mundo, tanto caos y destrucción, sí. Nos llena de duelo, de luto. La oscuridad está muy expandida, hasta parece que nos va a arrastrar y aniquilar. Pero recuerda que está fuera de nosotros.
BorrarNosotros seguimos, vivos y con nuestra capacidad de amar y de dar. Esa es la luz. Xavi: Tú tienes demasiada luz, en tu poesía, la dejas ver con frecuencia. Enfócate en esa luz propia, déjala crecer, confía en que nadie te la va a quitar, sin tu permiso. Es tuya, tú y solo tú la generas. Ocupado en ello, no tendrás disposición para la oscuridad, no cabrá en ti, porque ya la luz llena ese espacio de tu ser.
Te abrazo.
Precioso ❤
ResponderBorrarQue siempre sepamos seguir por el sendero de la luz, que nunca lo perdamos. Que nunca nos engañen con oscuridades.
Te aplaudo 👏🏼👏🏼
Ojalá que si sea, Galilea. Gracias.
BorrarUn abrazo.
No hay lo uno sin lo otro. No me creo que nadie tenga su pequeño (y oculto) lado oscuro.
ResponderBorrarBastante grande y visible es el lado oscuro. Y todos lo tenemos, unos hacemos más ostentación que otros de nuestra oscuridad.
BorrarAl pretender mostrarnos de iluminados, estamos siendo muy oscuros, porque sí fuéramos iluminados, no tendríamos que promoverlo. Al promovernos de iluminados, ya es oscuro, porque es carencia de humildad. El iluminado, alumbra de manera callada y humilde.
Abrazos.
Hay que tener mucho optimismo, perseverancia y entusiasmo para no dejar entrar a la oscuridad y permanecer en la luz...aunque algunas veces se nos apaga la luz. Besicos
ResponderBorrarAlgunas veces se nos funde el cable de nuestra luz, jajaja.
BorrarPero hay que procurar regresar al redil cada vez que nos suceda, en cuanto podamos.
Besos.
Luz y oscuridad. Cara y cruz de la misma moneda
ResponderBorrarAbrazo
Una moneda al viento a ver lado cae, para ver cómo vamos a ser hoy.
BorrarBesos.
Entro en tu blog, como partícula privativa, tratando de no dejar huella, de no levantar sospechas, pero con todo el interés centrado en deleitarme. Gracias infinitas.
ResponderBorrarUn abrazo.
Gracias, Paco. Solo que sin hacer ruido, pero no te imaginabas que se iba a iluminado mucho con tu presencia y así te detectamos. Jajaja Gracias por la luz de tu corazón tan generoso.
BorrarBesos y un gran abrazo!
Sara, tu poema es una lucha entre luz y oscuridad...Ambas nos rodean y quieren primar en el alma...qué difícil mantener el equilibrio, ver y sentir con claridad...Lo cierto es que la fé y la esperanza nos ayudan a aferrarnos a la luz y mantener lejos esa negrura destructiva, desesperanzada y caótica, que trae malos augurios...en nuestro mundo.
ResponderBorrarMi abrazo entrañable de luz, serenidad y calma, amiga
Ying y yang, siempre en lucha o en equilibrio. Somos esas dos fuerzas permanentemente, dentro de nuestra constante impermenencia. Allí lo interesante de esto de vivir.
BorrarUn abrazo grande
Magnífico tu poema, Sara,
ResponderBorrarsin oscuridad la luz no es nada, simplemente es...
No perdamos esa Luz que versas, es nuestra guía...
Hermoso, Sara, feliz semana, besos
Muchas gracias, Milena. Hay que estar siempre muy pendientes de no alejarnos de esa luz.
BorrarUn abrazo grande.
La LUZ sin la OSCURIDAD, no tendría importancia; y viceversa.
ResponderBorrarBESITOS PRINCESA ^:^
No serían la una sin la otra.
BorrarAbrazo grande.
Las luces y las sombras, siempre juntitas y de la mano... Ayer mismo escribí sobre eso... Buen poema.
ResponderBorrarUn beso en verso.
Eva!!! Qué alegría que me visites de nuevo.
BorrarVoy volando a ver tu escrito.
Un abrazo enorme.
Son inevitables las dos. Pero prefiero la luz.
ResponderBorrarUn gran abrazo.
Estar en la luz es lo mejor... Procurar no salir de allí. O regresar lo antes posible, cuando nos estemos poniendo oscuros.
BorrarBesos
Muy bonito!! Que podamos transitar ese sendero de luz aún en los momentos de oscuridad. Un beso
ResponderBorrarLuz y oscuridad suelen andar de la mano, y nosotros vamos transitando el camino a veces de una lado, otras del otro. Es inevitable conocer ambos, el reto esta en no quedarse mucho rato en el lado oscuro y tratar de alimentar la luz.
ResponderBorrarAbrazo Sara que nos haces pensar!