Sin miras de regeneración, mejor prohibieron al pueblo manifestarse, quejarse, narrar, externar, decir, compartir, reproducir, grabar, evidenciar el avasallamiento, las malas prácticas y los abusos de los grandes consorcios, funcionarios y autoridades.
El indefenso pueblo: acató, enmudeció, se paralizó y resguardó en sus casas (¡Claro, claro!, quienes aún tenían), pero todos quedaron ocultos y dispersos, o séase: inexistentes, dentro de su invisible carcelita.
Sin embargo, los dueños, ejecutores y cómplices del sistema, en vez de disfrutar de la supuesta tranquilidad que les representaría contener a los detractores; se sintieron perseguidos, acosados y agredidos por una imparable "oleada de invisibilidad, inmovilidad y mudez". Hasta que...
Sin embargo, los dueños, ejecutores y cómplices del sistema, en vez de disfrutar de la supuesta tranquilidad que les representaría contener a los detractores; se sintieron perseguidos, acosados y agredidos por una imparable "oleada de invisibilidad, inmovilidad y mudez". Hasta que...
Vieron a una partida de pancartas y carteles, que sin participación humana, desfilaban y se manifestaban por doquier, y que además, se iban reproduciendo al ritmo de su miedo y angustia, más rápido que su alocada respiración, hasta que abarcaron todos los sitios en descomposición del mundo.
Acá, allí, allá y más allá de acullá, discretos carteles sin letras impresas, vacíos, mansos, ordenados, calladitos, solamente circulando, sin reclamos, ni alusiones a personas, actos o circunstancias. Todos "respetando muy respetuosamente" completita la nueva ley... en su condescendiente dinámica en blanco, ¡Sí, en blanco!
Acá, allí, allá y más allá de acullá, discretos carteles sin letras impresas, vacíos, mansos, ordenados, calladitos, solamente circulando, sin reclamos, ni alusiones a personas, actos o circunstancias. Todos "respetando muy respetuosamente" completita la nueva ley... en su condescendiente dinámica en blanco, ¡Sí, en blanco!
Los creadores y ejecutores de la ridícula y retrógrada ley, desesperados, acudían a atención médica, psiquiátrica, oftalmológica. ¡Claro!, ya antes habían intentado con escapes a sus fincas vacacionales, al masajista, al yoga, a centros holísticos, al temazcal, al santero, a las montañas, al club, al bar, a la ópera, al diseñador de imagen, al esteticista, al botoxista, de circuito por otros continentes o sus islas exóticas. Pero nada, nada, aliviaba lo que sentían con los no mensajes tan activos. Su padecer era algo más doloroso que si de súbito les hubiesen ordenado 'ponerse a trabajar en vez de delinquir o abandonar las banalidades'.
... Luego de esas alucinaciones, siguieron las auditivas. Les gritaban lo detestable que era su naturaleza, con sus errores, sus crímenes, sus traiciones. Y, no habituados a escuchar a nadie, menos a las voces de su interior-puesto-que-las-entregaron-en-el-mismo-paquete-cuando-vendieron-su-alma-al-inicio-de-su-carrera-tras-su-diosecillo-dinero, no lo soportaron. Pues, además de escucharlas por primera vez, también fue por primera vez en su vida que entendieron el significado y magnitud de lo que eran y les provocó pesar.
Así que uno a uno fueron desapareciendo: dimitiendo, huyendo, autoencarcelándose, brincando desde lo alto de edificios, unos hasta se ahogaron en vasos de agua, otros se ahorcaron con las pestañas de sus amantes y así... usando todos ellos, los más choteados métodos de fuga por las puertas falsas, corredizas y hasta giratorias, sin arte ni para desaparecer. Contaron que hubo un juez que se echó a la mar de desprestigio que lo llevó hasta el fondo, por haber defendido a una repudiada mujer, de quien en mala hora se enamoró.
Los suicidios más dramáticos, fueron los de quienes se asfixiaron por su hedor, que ya no pudieron ocultar sus exquisitos perfumes; o dentro de sus piscinas, que su esencia de mierda convirtió en pantanos.
El caso es que para no caer en redundancias o escatologías... se autoaniquilaron de uno en uno, ante la presencia de los cuantiosos grupos de pancartas y carteles sin mensajes, de su imaginación.
Y, como en el juego infantil de "Las estatuas de marfil", al contar 1, 2 y 3, los del pueblo salieron de sus guaridas y recuperaron su vida en libertad... mientras que los más listillos ya empiezan a organizarse para ... No, ¡no! Mejor se queda por un rato el final optimista.
Así que uno a uno fueron desapareciendo: dimitiendo, huyendo, autoencarcelándose, brincando desde lo alto de edificios, unos hasta se ahogaron en vasos de agua, otros se ahorcaron con las pestañas de sus amantes y así... usando todos ellos, los más choteados métodos de fuga por las puertas falsas, corredizas y hasta giratorias, sin arte ni para desaparecer. Contaron que hubo un juez que se echó a la mar de desprestigio que lo llevó hasta el fondo, por haber defendido a una repudiada mujer, de quien en mala hora se enamoró.
Los suicidios más dramáticos, fueron los de quienes se asfixiaron por su hedor, que ya no pudieron ocultar sus exquisitos perfumes; o dentro de sus piscinas, que su esencia de mierda convirtió en pantanos.
El caso es que para no caer en redundancias o escatologías... se autoaniquilaron de uno en uno, ante la presencia de los cuantiosos grupos de pancartas y carteles sin mensajes, de su imaginación.
Y, como en el juego infantil de "Las estatuas de marfil", al contar 1, 2 y 3, los del pueblo salieron de sus guaridas y recuperaron su vida en libertad... mientras que los más listillos ya empiezan a organizarse para ... No, ¡no! Mejor se queda por un rato el final optimista.
*Sin dedicatoria, acatando pues.
No nos callarán.
ResponderBorrarYa pueden legislar barbaridades y poner multas impagables.
No lo conseguirán.
Ni en mil años.
Besos y gracias por tu grito mudo.
:)
Esa debe ser la actitud, Xavi. Que no cunda el pánico, como dijera el "Chapulín Colorado".
BorrarFuerte abrazo.
Cálmate que te va a dar un infarto...
Borrar¿¿?? No entiendo.
BorrarCreo que enfocamos mal el problema de la gobernanza, de los mandamases, de los legisladores o de cualquiera que pretenda ascender en esa escala de perversión humana donde lo único válido es el poder sobre todas las cosas, sobre todas las personas. Poder que viene acompañado de fortuna, posición, impunidad y prestigio en una sociedad deshumanizada.
ResponderBorrarTe dejo una afirmación por si quieres investigarla: se estima que el 1% de la población esta carente de empatía y en gran medida con emociones disminuidas o nulas. Malo sería que este 1% fueran de los que estamos hablando, ¿verdad?
Tienen un nombre pero te lo dejo por si tu lo descubres.
Un abrazote.
!% que no permite que el 99% enfoque nada fuera de sus enfoques.
BorrarExcelente comentario, Ibso! Un abrazísimo.
Alciinate,,,,, tanto para la derecha como para la izquierda, total todos son iguales no???
ResponderBorrarBuen domingo
Cariños
Es que es tan abrumadora la adulación, que no importan los puntos cardinales, todos enferman en cuanto se sientan en ella. Se les olvidan las promesas, adquieren compromisos para llegar y ya todo al traste.
BorrarUn abrazo e anís.
Y los que no gobernamos...
ResponderBorrarSomos mejores, iguales o peores?
Palabras llenas de sentido que nos hacen reflexionar. Gracias.
Un abrazo.
Peores, Armando. Somos peores. Y si estuviéramos en su lugar, seríamos más peores. : (
BorrarUn fuerte abrazo.
Graciasss por ese apoyo moral que siempre nos llega desde lejos pero cada vez más cerquita.
ResponderBorrarBesines utópicos, Irma.-
No hay tierra ni mar suficientes para distanciar mentes y corazones de los amigos.
BorrarUn abrazo grande.
....¿?
ResponderBorrarMe perdí paisana!
Saludos =)))
Ay, mi querida paisana!!! No me digas eso, plis. Y bájale dos mordidas al chocolate y súbele dos páginas a las noticias... por lo menos de donde tienes amigos en tu bloK.
BorrarBesos anisados.
ahhhhhhhhh.....! estaba medio dormida yo creo!
Borrar=))
Jajaja, supongo, amiga.... pero ya despertaste. Entonces, comamos un chocolate en tu manicomio, o.k?
BorrarUn abrazo muy grande.
Uy, todavia tengo escalofríos despues de leer esa alegoria a la nueva y nefasta ley mordaza, o el menos eso me pareció a mi, espero que no les vuelva a votar nadie... :(
ResponderBorrarBesos y salud
Que nos los vuelva a votar nadie.... que ustedes sí tengan una democracia, porque acá no los votamos y de todas formas ponen a quien designa la Casa Blanca de EEUU
BorrarUn abrazo enorme, Genín.
"Acá, allí, allá y más allá de acullá, discretos carteles sin letras impresas, vacíos, mansos, ordenados, calladitos, solamente circulando, sin reclamos, ni alusiones a personas, actos o circunstancias. Todos "respetando muy respetuosamente" completita la nueva ley... en su condescendiente dinámica en blanco, ¡Sí, en blanco!"
ResponderBorrarMUCHAS GRACIAS POR HACÉRMELO LLEGAR amiga del otro lado del " charco" jajaja es increíble que aún en el siglo en que vivimos quieran acallar al pueblo, a los pueblos ...no se si seremos mas los buenos o los malos, no se en que proporción, pero el pueblo tiene que tomar conciencia y no dormirse en los laureles de la comodidad ¡¡ No hay que votarlos, no a la ley del miedo.
Un abrazo grande.
Hace mucha falta que los pueblos despierten... Esperemos y espero que pronto se anule esa tontería tan absurda que les han impuesto. Solo eso faltaba.
BorrarFuerte abrazo, Ysu.
Sara, conmovedora ficción en cuanto remueve conciencias, ojalá algún día consigamos ser mejores todos, aprendamos a elegir a quienes nos administren y estar atentos a cada intento de hacernos callar, el primer paso es el que debe impedirse, luego es tarde para lamentarnos, gracias por este post de hoy, un abrazo!
ResponderBorrarGracias te doy yo a ti, por tan generoso comentario.
BorrarMuchos besanises, M. Cristina!!
Amiga Sara, primero mis disculpas por tanta ausencia. Ya hablaremos.
ResponderBorrarPor lo demás, siempre es agradable y sobre todo emocionante que desde un sitio tan lejano como es aquel México donde vives, puedas tener sensibilidad con los problemas que nos embargan. Desgraciadamente tenemos un gobierno que para ocultar tanta miseria como está dejando, desahucios, pobreza laboral de trabajadores que no llegan a fin de mes por la dramática bajada de sueldos, despidos, empleos precarios, incluso con contratos por horas, privatizaciones, y sobre todo una corrupción que ha tejido totalmente como una tela de araña este partido que se dice popular, ahora se saca de la manga una ley digna del dictador Franco: la llamada "Ley Mordaza". Es la solución de este gobierno a los problemas sociales, callar la escasa conflictividad social con multas infames admninistrativas que se saltan a los jueces. Es decir, coacción, pobreza y represión.
Saben que van a perder las elecciones porque la gente está harta de ellos, de sus mentiras y corrupciones; su solución: "El silencio de los corderos"
Lo único positivo es que les quedan escasamente cinco meses de mentiras y manipulación.
Un abrazo Sara.
Siempre me importan los acontecimientos que ocurren alrededor de las personas que quiero. Tu ausencia, no importa, sé que traes la agenda muy ocupada y que en cuanto tengas tiempo te reportarás. Descuida!
BorrarCreen los ilusos que con silencio sus actos no se verán, pero no se dan cuenta que con el silencio, todo se ve más claramente. Ellos solos se han puesto en un escaparate más grande. No permitan más que les timen, espero que su democracia, si sea una verdadera democracia. Acá la palabra es simple palabra, pero nunca la hemos conocido. Tuvimos una alternancia, que les sirvió para reforzarse a los que siempre han estado, solamente. Pero democracia ¿qué cosa es eso???
Gran abrazo!!
No lo van a impedir la golondrinas,
ResponderBorrarni ventanales rotos, ni lunas nuevas,
ni todos los andamios, ni las hormigas,
ni flores, ni herejías, ni colmeneras.
No lo van a impedir los corre mundos,
ni los soldados, ni las primaveras,
ni aun negándolo el viento de muro en muro,
ni aun negándolo, al fin, donde se crea.
No lo van a impedir ni andén, ni esquina,
ni el temor de la virgen si obscurece,
ni el humo de las calles y llovizna,
ni el canto del verano que anochece.
No lo van ha impedir ni el falso amigo,
ni el que alimenta el cepo y la tortura,
ni el pequeño ladrón de mano fría,
ni el terrible don Juan de cara dura.
No lo van a impedir ni moralistas,
ni el indiscreto encanto del embrujo,
ni ausentes millonarios, ni arribistas,
ni aspirantes al hacha del verdugo.
No lo van a impedir las bandoleras,
ni el letrado galán de poco vuelo,
ni inquisidores, ni aguafiestas,
ni eternos sembradores de veneno.
No lo van a impedir los enemigos,
ni atentos intimistas alabados,
ni burócratas tiernos, ni podridos,
ni herederos, ni apóstoles errados.
No lo van a impedir del valle al cielo,
ni reyes del honor, ni periodistas,
ni antiguos comediantes, ni embusteros,
ni estudiantes de leyes, ni alquimistas.
No lo van a impedir los generales,
ni adorables doncellas pervertidas,
ni apelables procesos judiciales,
ni perros, ni cometas, ni suicidas.
No lo van a impedir ni prohibidos,
ni novios convencidos, ni hechiceros,
no lo van a impedir las soledades
a pesar del otoño creceremos,
Creceremos.
Como bien dijo Amaury Pérez... ¡Sí señor! Perfecta es tu aportación, Cuasi.
BorrarUn fuerte abrazo!
Gracias por tan magistral texto.
ResponderBorrarEres una maravilla.
Un beso
Muchas gracias, Amalia, eres un sol!!!
BorrarUn abrazo grandotote.
Nunca faltan en este puñetero mundo los opresores y los oprimidos.
ResponderBorrarPor los siglos de los siglos.
Pasan los siglos y vamos para atrás en muchos aspectos.No entendemos.
BorrarBesos.
¡Qué decir!...¡Qué decir!...De a poco se van generando ovejas y así tendrán un conjunto de ovejitas que no protesten porque es dañino.
ResponderBorrarExcelente texto Sara.
Un abrazo.
La cobardía es un gran freno y ellos saben que la cobardía es mucha.
BorrarBesos, gracias Taty!
Los gobiernos van de mal en peor!
ResponderBorrarEs verdad... esperemos que se logren los cambios necesarios.
BorrarUn beso.
Hay que ver como les va a ellos para esperar lo peor que nos irá a nosotros.
ResponderBorrarAquí los que alzan la voz son acallados por la indiferencia de los mismos que debían estar levantando la voz. (gritar desde twitter no vale o si, igual la policía te vigila).
Un abrazo
Abrazo mana
¿Dónde iremos a parar, mana?
BorrarUn beso.
¡¡No nos van a callar!!
ResponderBorrarHasta los duendes informáticos lo han pretendido mandando tu grito solidario (¡gracias!) a la bandeja de spam :(
Qué mal, querida Sara. Varias personas me han comentado que no respondía a sus correos y me quedé "ojiplática" (ojos de plato) porque no había visto ninguno de ellos. Hasta que miré la bandeja de spam (que además estaba oculta)... en fin que estoy deshaciendo los "metepata" de los duendes y aquí estoy agradeciendo no solo que me tengas en cuenta sino el cuento que nos regalas para animarnos a no cejar en el empeño y derrocar a los corruptos de nuestros gobiernos.
Un abrazo enorme (que llene el hueco de aquí a allí). Y dos besos.
Un gran abrazo hasta donde estés en este momento.
ResponderBorrarUn abrazo grande para ti, querida. Por aquí seguimos... aunque sea a empujones y saltos.
ResponderBorrarComo se pueda, pero hay que seguir.
BorrarGracias por acudir a mi llamado a este rincón de mi blog, para abrazarte.
Cuídate, preciosa!