No temas. Permite que los demás hablen también. Percibe su valor. Escúchalos. Aprende.
No te inquietes con el silencio, déjalo desarrollarse libremente. No cortes su preciosa esencia con palabras de más. Permite que te brinde en esos momentos lo mejor de los demás y de ti.
Deja que el silencio ocupe tu boca, con su máxima contundencia. Hablar solo por hablar, es inseguridad y vacío. Escucha a los demás y a tu corazón... Nunca te arrepentirás.
No te inquietes con el silencio, déjalo desarrollarse libremente. No cortes su preciosa esencia con palabras de más. Permite que te brinde en esos momentos lo mejor de los demás y de ti.
Deja que el silencio ocupe tu boca, con su máxima contundencia. Hablar solo por hablar, es inseguridad y vacío. Escucha a los demás y a tu corazón... Nunca te arrepentirás.
¡Cuánto cuesta callar! Con razón es norma en la órdenes religiosas.
ResponderBorrarBesos.
Cuesta mucho. Pero a ti te diría lo contrario: 'habla mucho más!, pues cada vez que hablas es para enseñarnos, así que tú si habla y habla sin cansar por favor!!!
BorrarBesos.
Creo recordar si no me equivoco un viejo refrán.." Quien calla ..otorga"
ResponderBorrarUn abrazó.
En ese caso no calles, puedes dar tu aprobación con el silencio a algo inconveniente.
BorrarAbrazo.
Querida Sara, creo que saber escuchar es toda una ciencia, que a medida que crecemos la vamos aprendiendo y....entendiendo.
ResponderBorrarEs como siempre te digo oir las camopanas, todas tienen distintas melodias, no todas nos pueden gustar, pero enseñan a nuestro oido los tonos diferentes.
Un abrazo cariñoso vuele hacia alla.
Qué bien lo has dicho, no lo olvidaré.
BorrarUn abrazo igual para ti.
El silencio -a veces- nos dice tanto o más que las palabras.
ResponderBorrarUn beso Sara.
Sin duda Ella! Un beso, mi paisa.
BorrarUn silencio vale más que mil palabras cuando lo llenas de sentimientos,
ResponderBorrarcuando lo llenas de Amor,un silencio vale más que mil palabras cuando
dejas que tu mirada,tus gestos,lo digan todo,cuando sonries leyendo en el corazón de quien está junto a tí.
Un beso y que pases una agradable jornada
¡¡¡Disfruta el día!!!
Gracias Julia... sobre el tema tú lo sabes mucho mejor que yo por kilómétrica ventaja y experiencia. Tú también disfruta, recibe dos abrazos... No mejor uno solo, pero para dos.
BorrarQueridisima Sara, como ves de nuevo aqui, saludandote con cariño. El silencio nos dice tanto, nos aclara tantas cosas que en este mundo ruidoso a veces no escuchamos, y siempre nos da la respuesta correcta de como actuar. Feliz de estar con ustedes. Un beso. Martha
ResponderBorrar¡Qué alegríaaaaa! saber que precisamente tú, querida amiga has roto tu silencio... Me alegro muchísimo de verte de nuevo por acá.
BorrarUn beso cariñoso.
Hola Sara. La palabra escuchada en el silencio llega con más firmeza y aprendemos así su lenguaje. Es el silencio que permite el surgir de la palabra en el dialogo llevándonos a razonar, discernir…
ResponderBorrarUn cálido abrazo
Gracias por aportarnos algo tan delicadamente descrito. Ayuda mucho callar.
BorrarAbrazo fuerte y gracias por el tuyo.
Muy bonito Sara, y muy buen consejo.
ResponderBorrarBesitos
Qué linda Verónica, muchas gracias.
BorrarBesitos también.
¡Tantas veces hablamos y hablamos por no querer escuchar!
ResponderBorrarUn beso
Tienes razón, y también sucede por no querer escuchar nuestra voz interior.
BorrarUn beso
No puedo estar más de acuerdo.
ResponderBorrarVale mucho más escuchar que hablar. Por suerte adoro el silencio.
Un beso Sara
Yo también Eva Letzy y lo busco diariamente, aunque sea un ratito, me desintoxica de ruido y del exceso de palabras.
BorrarUn beso!
El silencio sana. Siempre, por eso detesto el ruido, o el hablar por hablar, como nuestra vecina, la Clotilde, ambas le huimos. Porque nos cansa intentar seguirle la corriente de su charla vanal, y no podemos poner cara de que la estamos escuchando, "no tenemos cara para ello".
ResponderBorrarNos parecemos, querida Sara.
Abrazos.
Y yo que no había querido decírtelo, porque pensé que eras muy su amiga, que te vi tan entretenida la otra tarde charlando con ella, jajaja!
BorrarAbrazos, Alicia María.
Es que me contaba algo de vos, pero no puedo... no puedo, no debo contarte lo que me dijo.
BorrarIgual, pasate por casa, al menos tomamos unos mates, en silencio si quieres, apenas el de la bombilla entre la yerba.
Te me cuidas por favor, querida vecina.
Jajajaja! Todo lo que te diga, es cierto! jajaja.
BorrarMe encantó estar por allá y los mates más.
Besos.
Un buen consejo, Sara. Oír antes de decidir, callar antes de chillar, esperar en silencio antes que maldecir.
ResponderBorrarEl problema es que los humanos nos hemos acostumbrado a hablar, escribir, comunicarnos, mediante unos medios que a veces son demasiado frívolos para lo compleja que es comunicarse. Por ello, el consejo es bueno y debe ser cumplido por todos aquellos que crean en la belleza de la comunicación por otros medios.
Un fuerte abrazo, querida Sara.
Antonio, siempre tan acertado, siempre das en el blanco... qué te digo, con tanta sabiduría que tienes. Solo ¡gracias! por estar cerca de mí, para aprenderte mucho!!!
BorrarUn fuerte abrazo también.
Muy buen consejo, estamos tan inmersos en nuestras cosas que no escuchamos
ResponderBorrarUn abrazo
Registramos lo que oímos, pero no le damos la importancia debida y con ello a las personas. Eso es alarmante.
BorrarUn beso.