Ocuparé mi hoy,
mi mañana y mi pasado mañana,
para olvidarte.
No volveré a recordar tu cara,
ni tu risa, ni toda esa vida,
que pareció tan breve.
Tal vez sea incongruente,
tanto como el hecho
de que debemos terminar.
Déjame explicarte,
una o un millón de veces,
que no es mejor así.
Ven para que sepas
que usaré todos mis días,
en olvidarme de tu existencia.
Ay, Sara, qué gran verdad... Los hijos del instante pueden ser eternos...
ResponderBorrar"Los hijos del instante pueden ser eternos" hay que enmarcar esta frase.
BorrarOcupare todos los días para olvidarte, pero ven a verlo, jajaja. No es así la cosa?
Abrazos.
Para gozar hay que comenzar por olvidar.
ResponderBorrarTambién se goza no olvidando.
BorrarDifícil disyuntiva la que nos planteas, querida Sara. Un dolor en el corazón que sin embargo queremos... Son tan complicados los asuntos del amor!
ResponderBorrarBesos querida amiga poeta
Son los asuntos más complicados. Besos.
BorrarSostengo que el olvido llega cuando ya no lo necesitamos, mientras reclamamos por el.
ResponderBorrarUn abrazo grande Amiga!
Qué cierto, se necesita algunas veces no olvidar.
BorrarOtro para ti Cecy amiga.
Estupendo poema que mezclado con la imagen es en si mismo una contradicción. Te quiero, pero necesito olvidarte. Los misterios del corazón que a veces la razón no entiende.
ResponderBorrarUn abrazo
Cuando se dice lo contrario a lo que se hará ¿verdad?
BorrarOtro para ti, José Vte.
Nuestros sentimientos son una compleja contradicción.
ResponderBorrarBeso
Cuando nos vemos precisados a hacer lo que no queremos.
BorrarUn beso grande.
Si...a veces es imperioso olvidar.
ResponderBorrarCariños
Gracias por tu comentario Abu, feliz fin de semana.
ResponderBorrarGracias Sarita por tus cariñosas palabras en mi blog. Viniendo de tí, no sabes cómo me alegran... A veces no hay más remedio que olvidar... Aunque sea a base de Valium para poder dormir. Besitos amiga mía.
ResponderBorrarGracias amiga encantadora y luminosa. No uses nada para dormir, por favor.
ResponderBorrarMuchos besitos.
Una vez más, veo claro que no entenderé nunca la mente femenina: "usare todos mis días, en olvidarme de tu existencia". A veces más que la hembra de la especie, me pareceis de otra especie...
ResponderBorrarUn saludo, Sara O. Durán
Dice en realidad, siempre te estaré recordando.
ResponderBorrarUn saludo Pepe Deapié.
No sé, no sé :P Si usas todos tus días para olvidarte, al final lo estás recordando todos los días. Con lo cual, hay no hay un desamor aunque a primera vista nos lo pueda parecer, si no un claro, y posiblemente loco, amor. Sin duda, es mucho más bonito el amor :) ¡Que triunfe! Un beso jeje
ResponderBorrarAsí es Natalia, le está diciendo todos los días te estaré recordando, aunque tú no a mí.
ResponderBorrarBesitos.
Yo para olvidar no necesito hacer esfuerzos, Sara; vivo tan "el momento" que así me ahorro sufrimientos inútiles... debe ser la fuerza de la costumbre o que la costumbre me dio las fuerzas ;)
ResponderBorrarabrazos
Qué bueno que vives en presente... Yo vivo en tres tiempos, me resulta más grato.
ResponderBorrarAbrazos.
p.d. la protagonista de esta entrada, en verdad, le está diciendo a su persona amada, no quiero olvidarte y no lo haré. Ven para que te des cuenta.