¿Supiste del gran berrinche que se hizo en Nicaragua? ¿No? ¡De lo que te perdiste!, igual que yo, me acabo de enterar. Es una gran actividad cultural, que este año se llevó a cabo del 21 al 27 de enero.
¿Puedes imaginar las calles de Granada, Nicaragua, en América, vestidas de diversión, convivencia, fiesta, niñez, color, con: música, teatro, literatura, pintura, danza y por supuesto lo relacionado con temas ambientales y preservación de especies...? ¿Claro que sí? ¡Yo también, ya lo estoy viendo, sin perder ningún detalle!
Pero... ¡chin! cuánto lamento no haber podido asistir de verdad... ¡Qué envidia hacia quienes sí fueron! ¡snif! quizá sea después, ya enterados de "Berrinche Ambiental". Esta fue la cuarta edición. Y, nada que ver con lo que nos imaginamos al leer la palabra berrinche ¿verdad? Es algo muy positivo.
¡Enorme felicitación para todos los habitantes de ese hermoso y maravilloso país... y que sigan haciendo muchos berrinches, para que se sepa, se vea, se escuche y se sienta, cada vez más alto, intenso y lucido, que de todo el mundo llegue muchísima gente año con año a admirarlos y quererlos, tanto o más que yo, y no porque haya estado ya por allí, sino porque a los hermanos simplemente se
les debe querer!!
Me alegro, ojalá continúen con sus berrinches.
ResponderBorrarYo que soy vecina de ellos, no me enteré. ¿Cómo ves?
Saludos.
Ojalá que sí, que vaya creciendo su fiesta cada año y que puedas ir el próximo año!!!
BorrarUn abrazo y feliz fin de semana!
Pues , efectivamente, yo no entiendo berrinche en positivo, sino como una rabieta infantil.
ResponderBorrarY es bueno que tenga otro matiz.
Es como una manera divertida de considerar "la pataleta" que hace el medio ambiente por nuestra falta de respeto hacia él y este movimiento es la respuesta para sensibilizar... así lo veo ¿será?. Mejor, hay que ir el próximo año, para poder saber bien como está la cosa, jajaja!
BorrarAbrazo.
¡que lindo Sara! ¿será cierto en ésto lo de "nunca es tarde"?....afectos para vos...
ResponderBorrarAy Lao, con toda la esperanza del mundo deseemos que sí podamos todavía tomar medidas correctivas.
BorrarGracias por tu afecto y te deo un fuerte abrazo!
Sara, Sara, Sara.
ResponderBorrarUn beso enorme.
Jajaja, espero que sea gusto y no disgusto... Que cuando mi mamá me decía así, ya sabía que vendría el regaño... así que no sé.
BorrarUn beso!
No conocía lo del berrinche, pero hace ocho años estuve en esa misma plaza de Granada y en otros lugares de "mi nicaragüita" pobre, cálida, exuberante y hermosa como pocas. Conocí la casa del gran Rubén Darío y me entristecí viendo niños descalzos vendiendo bolsas de agua por la Panamericana. Nunca la he olvidado, nunca la olvidaré.
ResponderBorrarGracias Sara.
Un abrazo grande
Si recuerdo que me contaste sobre tus andares por esa tierra linda. ¡Cómo me gustaría a mi conocer la casa de Rubén Darío!.
BorrarY de la pobreza... Mh! habiendo tantas cosas maravillosas de las cuales comentar sobre un país, cualquiera que sea, no preponderes su pobreza, la verdad. No sé, nunca me ha gustado ver para abajo a nadie, ni permitir que otros lo vean.
Recuerda que el sistema económico imperante en los paises actualmente, está trayéndonos mucha inequidad en todos los países, incluyendo el mío y el tuyo. Hace unos días un amigo regreso de europa quien estuvo por allá dos años y me dijo que le partía el alma ver la pobreza de España... Imagínate conociéndolos a vosotros, la que le arme... pudiéndome hablar de cada una de sus maravillosas cosas, gente, museos, monumentos, universidades, ciudades, espectáculos, estilo de vida, gastronomía...
Caray! hay que fijarnos en otras cosas ¿no?
Fuerte abrazo querido José Vicente.
p.d. Si me molesté un poco, te lo confieso...
Querida Sara, siento mucho que mi comentario te haya enfadado. Te cuento:
BorrarEstuve en Nicaragua hace unos ocho años durante un periodo de 15 días. No fui de visita turística, sino que fui a instalar la primera unidad de hemodiálisis pública en la ciudad de Estelí, era una donación del centro de diálisis donde trabajaba (en realidad era la segunda unidad que se abría en el país, en Managua ya existía un centro donde solo se dializaba a todo aquel que pudiera pagarlo).
Una de las cosas que más he lamentado fue que no pude visitar tantos lugares como me hubiera gustado, pero no era éste un viaje turístico, eso lo tenía muy claro. El montaje de la sala de hemodiálisis en el hospital San Juan de Dios de Estelí era urgente y vital. Eso era lo único importante. Hasta allí me desplacé yo solo para hacer la instalación, además de preparar al personal técnico y sanitario.
Un domingo me llevaron a realizar la única excursión turística que pude hacer, fue justamente a Granada, donde visité la catedral que muestras en una de las fotos y donde dimos un paseo en barca por sus famosas isletas. También compré un cuadro naif, que tengo colgado en mi casa y que representa a gente de fiesta, bailando en la propia plaza de Granada.
La casa de Rubén Darío afortunadamente la pude visitar aprovechando que pillaba de camino en el trayecto desde Managua hasta Estelí.
¿El resto del tiempo? No salí del hospital. El trabajo era mucho y el tiempo muy escaso, incluso me dañe un ojo porque me saltó sosa caustica y lo tuve tapado durante una semana, el viaje a Granada lo hice así, con pinta de pirata. La pata de palo ya la traía de casa.
Pero sí que tuve la fortuna de conocer lo mejor de Nicaragua, los propios nicaragüenses. Gentes dignas y trabajadoras pero sin apenas recursos económicos, gentes del campo muy pobres que en su mayor parte vivían en chabolas y casas de adobe con techos de uralita, en su gran parte sin agua y sin luz. Vi chabolas incluso enfrente del mismo ministerio de salud. La ONG a la que pertenezco desde entonces, Valencianos por Nicaragua, se dedica a eso, a construir casas dignas y pozos de agua en las zonas rurales.
Traté con muchos de ellos en el hospital, y me hablaban de lo duro que era todo allí, de como todos, incluso los que tenían un buen trabajo, estaban deseando emigrar a EEUU porque allí no veían futuro, fíjate, lo mismo que está ocurriendo ahora mismo en España, que todos los jóvenes están emigrando como única salida posible a su futuro.
Esa, y la de personas muy amables, sencillas, alegres, agradables y de buena conversación, es la Nicaragua que yo vi Sara, siento que no sea una Nicaragua de postal.
De verdad Sara, siento mucho que todo mi comentario se haya reducido a la imagen, real, del niño descalzo vendiendo agua por la carretera, fue la primera que yo vi tras salir del aeropuerto de Managua. En el comentario había otras muchas palabras elogiosas y de admiración por él país.
Un país, Nicaragua, que siempre llevo en mi corazón, un país que nunca he olvidado y que nunca olvidaré.
Siento mucho que mi comentario haya provocado tu enfado. No volverá a ocurrir.
Un abrazo
Este comentario me parece todavía más desafortunado que el primero.
BorrarSin embargo, no te lastimaré, cuando ya tú solito te estás lastimando... que es lo que me ha molestado, porque no pones en mal a Nicaragua, sino a ti, como hombre de buenas causas. Estás faltando a principios elementales.
Te doy un abrazo con mucho cariño!!
Mi querida amiga Sariña: esplero que sigas bien en la esperanza que nos informes para ver fronteras ejasnas que también forman parte de nuestro interés humano.
ResponderBorrarMi cariño,
Rosa María Milleiro
Con un gusto enoooorme! de lo que me vaya enterando que suceda por acá.
Borrarfuerte abrazo!
Me encantaron la sfotos.. viaje un poquito con vos, GRACIAS Amo viajar!
ResponderBorrarBuen finde, lindo pasar por tu blog
Me alegro muchísimo Karu, bienvenida y regresa mil veces más, que es tu casa también!!
BorrarAbrazo.