Constancia

"Largo y arduo es el camino que conduce del infierno a la luz".  John Milton.

Me alegra cuando sé
de personas sobresalientes, en actividades en las que en sus inicios no fueron buenas y que les representó demasiado esfuerzo continuo.

Actividades en las que yo llegué a considerarme mejor, pero que no seguí, creyendo dejarlas en el camino. Siendo que en realidad era yo, la que se quedaba en el camino de esa actividad.

No me lamento, no va por ahí. Simplemente hoy pienso que para lograr lo que deseamos, hay que insistir, perseverar, ser constantes. Personas que como yo, no tenemos dificultad para prescindir y soltar, con frecuencia abandonamos muchos objetivos.

Admiro a la gente dispuesta a todo por lograr alguna meta, que nunca se desenfocan y que una vez obtenida, la mantienen. Yo no he sido así de guerrera, o quizá nada he querido tanto, como para no dejarlo en caso de serios conflictos, si alguien está más deseoso de ello que yo. No soy nada competitiva. Ni siquiera en las relaciones. Yo no sé luchar por retener a alguien, contra otro alguien o contra su voluntad.

Siendo amante de la libertad, doy por hecho que a los demás les gusta ser libres también y suelto, a los primeros síntomas de descomposición.

Ya me estoy desviando del tema. Qué maravilla es la gente con constancia. Capaz de ser como las gotas de agua sucesivas que horadan la roca o, como el perro que se come un hueso, así invierta horas en lograrlo. Además, "constancia" me resulta una palabra hermosa.

* En el blog he sido constante. En gran parte porque tengo amigos estupendos, muy estimulantes y porque es algo libre, sin horarios, sin condiciones, para ninguna de las partes.

¡Muchas gracias por su ayuda a que sea constante en esto!